AVELINA XVII
Tras ir a comer y desahogarme un poco con Susana, que no paró de decirme que era una exagerada volví a la oficina. Sólo me faltaba lo de los invitados para tener completada la operación fiesta. Un elemento importante de la misma. La verdad es que montar aquello me hacía mucha ilusión, era como un pequeño proyecto mucho más interesante que archivar cosas y contestar al teléfono, aunque tengo que decir a mi favor que es una visión bastante simplista de mi trabajo. Así que decidí animarme a ser productiva, y me puse manos a la obra. Al rato levanté la vista y para mi sorpresa allí estaba el galán que a mi me gustaba, con traje y corbata. Parece mentira que haya hombres que se resistan a llevar traje con lo guapos que están. Me miraba desde el pasillo y cuando se percató de que le había intersectado la mirada se decidió a venir hacia mi. No paré de mirarle con una sonrisa.
-¡Hola Avelina!
-¡Hola Toni!
-¿Qué tal la comida?
-Bien, ¿y tú?
-Bien. Has visto que no ha sido tan grave lo de arriesgarse.
-No, no lo ha sido. -Hice una mueca que no pude evitar.
-Qué picada eres.-Me dijo riéndose. Durante dos segundos me piqué aún más pero enseguida me hizo gracia.
-Sí tú lo dices.- Me defendí, aunque para ser sincera cada vez me gustaba más que alguien tan mono me conociera tan bien.
-Bueno, tengo que ir a trabajar.
-Yo también.- Sin despedirse empezó a alejarse y cuando bajé la cabeza hacia los papeles entró de nuevo.
-¿Cenamos el viernes?
-Vale.-Se despidió con una sonrisa y un gesto con la mano.
La verdad es que estaba muy contenta, me apetecía mucho quedar con Toni. La otra noche habíamos sido interrumpidos y aquello prometía.
Al final de la jornada, me fui pitando a casa , tenía que arreglarme había quedado con Juan Carlos. Hacía más de diez años que no lo veía. Él me había encontrado en el facebook. Y la verdad estaba muy contenta. No había sido muy amable con él cuando nos distanciamos. La historia era muy sencilla. Me había portado como una estúpida, tras perseguirle durante años, y una vez que ya le tenía olvidado me sorprende con una declaración de amor, simplemente me dijo que estaba enamorado de mi, a lo que yo entre sorpresa y dudas permití que me besara, me quedé con él un largo rato que me resultó sumamente agradable, él sintiendo por mi lo que yo tantas veces había querido que sintiera. Al día siguiente aquello se complicó sólo, él me había dicho que había jugado con ventaja ya que una amiga común le había dicho mis sentemientos hacia él y yo sin ningún tipo de rencor la llamé para preguntarle, simplemente quería que me lo contara ella, y cual fue mi sorpresa cuando tras la simple pregunta de por qué se lo dijiste, ella se puso a la defensiva, aquello se convirtió en un monólogo de reproches, que si era su amigo, que ella si queria se lo decía...y ante la reacción yo simplemente intentaba tranquilizarla sin mucho éxito la verdad, le intentaba decir que no pasaba nada, pero ella no me escuchaba, y cuando ya estaba a punto de desistir, su madre cogió el teléfono y me dijo, que su hija llevaba un collarín y que su marido estaba en el hospital y que dejara a su hija en paz, acto seguido me colgó el teléfono. Aquello me dejó consternada e intenté olvidarlo, al principio me invadió un sentimiento de culpabilidad enorme, me sentía fatal, pero cuando me serené me di cuenta de que esta chica no valía la pena, yo nunca hubiera permitido que mis padres fueran partícipes de una pelea con una amiga mia, la hubiera protejido, es cierto que como me enteré más tarde ella había tenido un accidente, lo que hubiera bastado para justificarla, pero también me enteré que tanto ella como su madre me habían criticado, es decir que una vez superado el apuro, había sido incapaz de aceptar que yo no le había reprochado nada, me pareció una puñalada, que asumí, pero que no perdoné, para mi la lealtad es un valor fundamental en la amistad. El concepto que de mi podían tener los demás,y más concretamente el que Juan Carlos pudiera tener de mi, más otras circunstancias que influyeron en mi, me hicieron dudar más , con el tiempo me he dado cuenta que aquel amor que sentí por él en su momento ya no estaba cuando él me besó y por ello es fácil deducir que cuando él vino a mi a aclarar las cosas yo lé rechace, y cuando él insistió mi sentimiento de amistad afloró y le dije que cuando volviera en Pascua, ya que él estudiaba fuera ya veríamos, y cuando él volvió no quise verle, y se lo aclaré por teléfono. Lo hice mal, lo se, pero en aquel momento me invadió algo que no me dejó fuerzas para enfrentarme a él. Y tras esa nefasta despedida, él me había localizado, y esa noche me iba con él a cenar.
Me puse lo más guapa que pude, no quería ligar con él pero sentía la necesidad de que aquel hombre que en su dia me había dicho que me amaba siguiera pensando de mi que era guapa. Tras 45 minutos de preparativos, salí de mi casa con la sensación de ir guapa, contenta por el plan y sobretodo por la cita del viernes con Toni.
6 comentarios
aINS!! Qué pasará con juan Carlos? y con TOni? Nos dejas con la intriga jajaja BESOS!!
ResponderEliminarA ver si ahora vamos a tener un rival para Toni...Darío no me preocupaba pero este Juan Carlos parece peligroso :)
ResponderEliminarJejeje, tendreis que pasaros la semana que viene si quereis saber más. ;)
ResponderEliminaruuuuh el pasado siempre vuelve... estoy deseando el próximo capítulo!!!!! un besín ^^
ResponderEliminarHolaaa!
ResponderEliminarHay un premio en mi blog esperando que lo recojan... jejeje
Besos
Dios no puedo estar mas enganchada a Avelina xDDD. Sube dos capitulos por semana!!!!! Un beso!!!
ResponderEliminarGracias por vuestros comentarios